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La naturaleza es grande en las cosas grandes, mas es grandísima en las cosas diminutas. Jacques-Henri B. de Saint Pierre


Las Médulas

Bueno pues estamos de nuevo aquí! Esta vez nos hemos ido a Las Médulas porque teniéndolas tan “cerquita” no podía ser que no conociéramos este lugar que es Patrimonio de la Humanidad.
Nos vamos a poner un poco en plan profesores de historia. Las Médulas, son los restos de la mayor mina de oro a cielo abierto del Imperio Romano  (José pero ahora no vamos a encontrar oro…no te empeñes en buscarloJ). El proceso mediante el cual los romanos extraían el oro se denomina “ruina montium” (derrumbe de montes). Consistía en lo siguiente:
1- Recogían y transportaban agua a través de un conjunto de canales escarbados en la roca, algunos de ellos de hasta 100 km de longitud.
2-Almacenaban el agua en depósitos situados cerca de la mina.
3-Ponían a los pobres astures a escarbar en el interior de la montaña una red de galerías y pozos sin salida externa.
4-Llenaban esta red de galerías y pozos con el agua almacenada e iban desestabilizando la montaña.
5-Soltaban una gran tromba de agua que provocaba el derrumbamiento de la montaña.
6- Separaban la arcilla de los cantos, limpiaban la arcilla y alé ya se tenemos listo el preciado metal.
Resultado: toneladas de oro para el Imperio Romano y un precioso y caprichoso paisaje para nuestros ojos.
Así pues, y esperando no haberos aburrido demasiado con la explicación, nos disponemos a emprender la marcha. La ruta elegida es la conocida como la senda de las Valiñas o ruta corta. Es una senda muy recomendable ya que es sencilla, corta (como su propio nombre indica) de unos 4km, y que nos permite adentrarnos en lo más interesante de este paisaje. Es una ruta circular que comienza tras atravesar el pequeño y coqueto pueblo de Las Médulas.
Al final del pueblo nos encontraremos con que el camino se bifurca en dos, los dos nos llevan al mismo lugar, pero para hacer la ruta circular, recomendamos coger el primero de ellos que es el que aparece a nuestra izquierda. Esta indicado y hemos de buscar siempre la dirección hacía la Cuevona.
Nada más comenzar a andar nos sorprende la exuberante vegetación de la zona, compuesta principalmente de robles, encinas y  sobre todo castaños. Estos últimos en su mejor momento del año, con sus tonos dorados y sus castañitas en el suelo (sabemos lo que estáis pensando pero… esta prohibido cogerlas L son de propiedad privada). Continuamos caminando por esta senda, que no ofrece dificultad, quedándonos sobrecogidos por la mezcla perfecta de la naturaleza con el bonito “destrozo” que ha provocado la mano del hombre.
Poco a poco vamos ganando altura y las vistas mejoran por momentos hasta que llegamos a la Cuevona. Esta es la galería con más altura de Las Médulas y ciertamente te hace sentir chiquitito. Desde este punto, hemos de dirigirnos a la Encantada (nos queda a nuestra izquierda y esta indicado). Esta es otra galería que esta moldeada con curiosas formas y simplemente se puede decir que tiene magia, ese no sé que, que tiene este lugar. Será que esta cargado de leyendas, que os contaríamos pero creo que llenaríamos 6 folios y sería demasiado.
Bueno pues desde aquí hemos de volver a la Cuevona y seguir un sendero bastante ancho que nos sale en dirección contraria a la que hemos venido, hay un cartel que nos indica hacía Las Médulas. En un determinado punto, al lado de una fuentecita llamada de la Tía Viviana, aparece un camino a la derecha que sube al Mirador de Orellán. Este se encuentra a 900 metros de la fuente pero ojo es una subida con un desnivel importante. Si queremos ir andando hemos de subir y bajar por el mismo sitio y continuar por el camino de nuevo. Nosotros decidimos ir después en coche. Así pues proseguimos nuestro camino disfrutando del otoño hasta llegar al pueblo de las Médulas.
Si alguien va con niños pequeños, personas mayores, esta cansado, escacharrado, etc. puede tomar este segundo camino y hacer la ruta ida y vuelta lineal por este sendero. Solamente tendrá que tener la precaución de al final del pueblo en el cruce de caminos que os comentábamos antes y tomar el camino recto, pasando por una barrera que esta señalizada como dirección prohibida para vehículos. A partir de ahí no tiene ninguna perdida, llegaremos hasta la Encantada y volveremos tras nuestros pasos, tras haber dado un cómodo paseo.








Con la descripción de la ruta concluida unas pequeñas recomendaciones turísticas.
La primera, es la visita más que obligada al mirador de Orellán. Al que podemos acceder con el coche desde el pueblo de Orellán hasta un parking donde hemos de dejar el coche para realizar los últimos y empinados 600 m andando. Nada más empezar a caminar tenemos una bonita postal de los montes Aquilianos. Al llegar al mirador se nos compensa el esfuerzo de la subida con una vista panorámica de toda la explotación minera que te deja sin palabras. 

 
 
Segunda recomendación, visitar las Galerías de Orellán, están al lado del mirador.  Son parte de los canales escarbados en la montaña.  Es toda una experiencia recorrerlos y hasta se pueden apreciar las marcas de las herramientas que se usaron para abrirlos. Uno de los dos canales visitables nos conduce a un “balcón” que si sitúa en medio de un corte vertical en la montaña. Un par de consejos bienintencionados; uno, a pesar de los cascos, cuidado con las cabezas y dos, claustrofóbicos mejor abstenerse. 








Tercera recomendación, visitar el Castillo de Cornatel. Este esta situado en la localidad de Villavieja a unos 12 km de las Médulas. Un desvío a la derecha, entre los pueblos de Carucedo y Santalla del Bierzo nos lleva hacía él (esta señalizado). Que decir de esta fortaleza, es mejor verla que contarla. Os recomendamos tomar distancia, acercaros, palparla y si os gusta la fotografía tomar imágenes desde los mil ángulos posibles. Y si no os va la fotografía sentaros a contemplar las increíbles vistas.


Pues esto es todo, las Médulas son un lugar muy rico a pesar de que los romanos se llevaran el oro. Rico en historia, en naturaleza, en arqueología, en gastronomía y en sus gentes. Hay mil rutas con las que perderse por este lugar, esta es solamente una más, pero esperamos que os haya gustado.























1 comentario:

Sharon. dijo...

Maravilloso lugar que me encantaría visitar.Gracias chic@s.